martes, 23 de junio de 2015

Incursiones piratas en nuestra costa.

                                     
 

De la Cartoteca Histórica del Servicio Geográfico del Ejercito.
  Extraemos las siguientes notas del año 1804. Relación de la consistencia de los puestos fortificados en la costa de Poniente de la Plaza de Cádiz y de la frontera de Portugal, hasta los límites…. de Extremadura por don Antonio Hurtado, Mariscal de Campo, Ingeniero director.
Signatura……… C—30 Nº 3 pags. 4.

    Toda la porción de costa comprendida entre el río Guadalquivir y el Guadiana se halla indefensa, siendo accesible por su naturaleza de playa, la posición que media hasta la desembocadura del rio Tinto, desde se haya la ciudad de Huelva, que sin más defensa que las torres vijias que se ha hallan esparcidas por todas ellas.

     Lo que produce con facilidad la ayuda que tienen los corsarios, los contrabandistas y los demás enemigos de introducirse por el río Tinto, que aunque de barra pero con 4 brazas de agua en pleamar hacia los pueblos de Huelva. Como Aljaraque, Gibraleón, Palos, Moguer, San Juan del Puerto y otros interiores del Condado de Niebla, como es el vado de Bonares, fondeando con el abrigo necesario y hacer incursiones.
    A dos leguas de la torre del Oro siguiendo la costa y a un cuarto de legua de la Barra de Huelva o la desembocadura del río Tinto, se ha halla una choza, a pesar con nombre de torre del Puntal que tiene sus torreros, aunque no hay vestigio de haber existido torre alguna. Puede ser que su destrucción en lo antiguo haya borrado memoria de ella. Hay opiniones de que convendría construir allí una torre de batería. Dicha torre o batería según reconocimiento de hechos estarían bien situados en la inmediación del expresado sitio del Puntal, entre los puntos que llaman Borrajara y Padre Santo; pero mientras este proyecto no se aprueba y tiene se puede suplir en parte con una lancha cañonera en tiempo de guerra, la cual defenderá la entrada o embocadura de los ríos de Huelva, Aljaraque y el Tinto que desaguan por una misma boca a causa de un bajo continuado que llaman el manto.
   Termina la Guerra de la Indepencia y antes del nefasto Borbón Fernando vII las costas de Huelva hasta Ayamonte son de nuevo visitadas por los corsarios piratas ya que en 1816 es el año del comienzo de la campaña hasta el año 1823 fueron capturados 9 navíos en el paraje de las Arenas Gordas (Playa de Castilla) quedando muchos quemados, hundidos o solo saqueados.
   Relación de algunos de los navíos capturados en las Costas de Huelva, a través de la prensa de aquella época como es el Diario Marítimo y el Diario Mercantil de Cádiz.
                                     
                                            

    La Fragata El Pájaro o La Diana una fragata que viniendo de la Habana, se dirigía para el puerto de Cádiz, fue detenida y saqueada por los corsarios rioplatense frente de la Torre de la Higuera, en la conocida Arenas Gordas, llevándose un valioso cargamento, los hechos ocurrieron el 2 de Octubre de 1817. Fue llevada a Buenos Aires y rebautizada de nuevo el día 23 de Diciembre del mismo año con el nombre de Luisa, cuyo nuevo capitán era Ezra Drew de Baltimore.
   Al día siguiente y frente a la Torre del Oro, la fragata conocida como el Correo del Rey ( o) La Actividad. Fue saqueada quedándose con todo lo que tenía valor económico y tirando a la mar la correspondencia del Rey y de los particulares.
    El día 8 de Octubre del mimo año le toco a la fragata Santo Cristo del Grao, siendo capturado frente los Asperillos, robándole toda la mercancía y echada a pique.
     Nos queda el San Antonio, un laúd que viniendo de Lisboa el 29 de Junio 1821 para Cádiz cargada de barriles de aguardientes fue capturado por una goleta insurgente colombiana, cuyo capitán se hacía llamar “El Libertador”, frente a la Torre del Oro. Le robaron todo el cargamento como los productos alimenticios, el equipaje de un pasajero, la ropa de la tripulación y todo lo que podía tener algo de valor.
     Esta situación fue tan compleja en nuestras costas, que en el año 1826 el gobierno español llego a plantearse la posibilidad de recurrir de nuevo a las torres almenara estudiando las observaciones económicas conseguidas años antes para evitar las posibles incursiones de los piratas berberisco. Ya que junto a la poca defensa, la Marina de Guerra no disponía de barcos en condiciones, para intentar corregir el problema. (A. H. N.)


José García Diaz.
Pepe El Carnicero. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario