domingo, 15 de noviembre de 2020

Un singular parricidio !

                                                                               


     Siendo en el día de ayer jueves 8 julio 1895, se vio ante la sección segunda de esta Audiencia, la causa seguida contra José Díaz Rodríguez (a) el Bonariego, por delito de asesinato en la persona del niño de dos y medio de edad, llamado Manuel Moreno.

  Tan bárbaro y repugnante delito, que hiere y subleva las conciencias más endurecidas, que tuvo lugar en Moguer el 24 de marzo del año pasado año, produciendo, como no podía menos, lo mismo en Moguer que en los pueblos de inmediatos, que el hecho tuvieron conocimiento, la justa y natural indignación.

  Desglosamos los autos, don el hecho tuvo lugar del siguiente modo: El niño citado quedó huérfano de madre, y el padre, de oficio trabajador del campo y sin otros bienes de fortuna para atender al cuidado del hijo, encargase de ello su tía Teresa Domínguez Ramos, hermana de su madre y mujer del procesado José Díaz Rodríguez (a) el Bonariego, con gusto y beneplácito por ambos, viniendo a quedar el niño Manuel Moreno prohijado por este matrimonio.

   El día 24 de marzo, sobre las nueve de la mañana del pasado año, y con motivo de la festividad del día, pues era Jueves Santo, el procesado se cogió muy tarde a casa, algo embriagado, acostándose enseguida.

    Muy de mañana se despertó el niño, y, cosa natural en los de su edad, comenzó a llorar porque la tía no estuviese pronta a acudir a sus infantiles e impacientes llamamientos.

                                                              


   Se despertó el José Díaz, y mal humorado lo mandó a callar, amenazándole con darles azotes si no lo hacía, y la criatura lloró más, y entonces, se levantó furioso y se acercó al niño, empezó a reñir y pegar para que se callara, y no pudiéndolo conseguir; lo golpeó tan fuerte con un puñetazo en el pecho, cuello y cabeza hasta el punto de dejarlo muerto entre sus manos.

   La escena que ocurriera entre el matrimonio cuando llegó la mujer y se encontró difunto su sobrino, no ha llegado a ponerse muy claro los hechos ocurridos; ello hizo que la mujer lo llevó al depósito municipal de el Cementerio para que lo enterrasen en el mayor silencio posible, pero más como algunos vecinos de la casa oyeron el castigo que dio al niño el José Díaz, y percibieron su muerte y traslado al cementerio, se extendió por todo el vecindario la especie de lo ocurrido hasta llegar a conocimiento de la autoridad, y hechas las consiguientes diligencias, se tuvo por  probada la muerte violenta del niño Manuel Moreno, puesto que la autopsia practicada, pudo apreciarse, además de muchas y grandes contusiones en el pecho y cuello, y algunas hendiduras en el cráneos producidas por los golpes de un zapato, que le habían de producir la muerte por necesidad.

   El procesado, en sus primeras declaraciones, dijo la verdad del hecho con todas sus graves circunstancias, más en el acto del juicio rectificó en parte sus declaraciones.

    Terminado en juicio de pruebas, el abogado defensor del procesado, que lo fue don Tomás Rodríguez Garzón, que tenía en sus conclusiones provisionales calificado de imprudencia temeraria, las modificó poniendo, caso de ser apreciado como asesinato, la atenuante de parentesco y otra, que, por la circunstancia concurrente en este caso, entendía como favorable a su defendido.

   Fue en el día de ayer el primer día que informó el Fiscal de S.M., señor don Carlos Toledano, que desde hace pocos días ocupa esta Audiencia muy dignamente dicho cargo, y previas algunas frases en elogios del Colegio de Abogados de esta capital y de los letrados que  en este ejercían tan noble profesión, lo mismo que de los señores Magistrados que formaban el tribunal, entró en materia, haciendo un informe de sencilla estructura, limitándose a exponer los hechos constitutivos del delito tal como se habían presentado en el acto del juicio y señalar la responsabilidad que cabía a su autor.

    La Acusación privada estaba encomendada al letrado don Carlos Capmany, el cual, después de contestar con frase muy corteses al saludo del señor Fiscal, dio principio a su informe acusatorio, haciendo los naturales cargos contra el procesado por la ejecución de tan tremendo delito. Sin apasionamiento, que no podría ser de otro modo, pero con la inflexibilidad de la misión que le estaba encomendada, el señor Capmany hizo una  brillante acusación, cuyo capítulo de cargos fue siempre dirigido por la razón y la justicia, poniendo fin a su trabajo, solicitando para el procesado un veredicto de culpabilidad, como autor del delito de asesinato en un tierno niño que, al abril los ojos a la luz, sufre la pérdida de la que le dio el ser, y que de modo despiadado encuentra la muerte en las nervudas manos de un hombre cuando lloraba la falta de las tiernas caricias y de los dulces besos de una madre.

   Difícil tenía que ser la defensa de un procesado al que tan duramente se le acusa de un delito tan bárbaro. De tan penosa misión estuvo encargado, como se ha dicho, el joven letrado señor Rodríguez Garzón, el cual dirigió su informe a probar que en la comisión del hecho que se trataba no concurría circunstancia para apreciar el asesinato, y si solo una imprudencia muy lamentable acaecida en ocasión de hallarse muy embriagado, en cuyo estado no pudo apreciar la intensidad de los golpes que daba al niño con el solo propósito de castigarlo.

                                                             


  Concluyó su informe solicitando se aprecie el delito como imprudencia o la alternativa de la circunstancia antes mencionadas, si el Jurado apreciarse el delito como asesinato. Durante el informe del fogoso letrado surgió un accidente algo personal entre el y el señor Capmany, por interpretación de conceptos, al que puso término el señor Presidente, visto que se las varias rectificaciones que tuvieron no venían acuerdo.

   Hecho el resumen por el Presidente del Tribunal de derecho, que lo era el señor Guerrero, se retiró el Jurado a deliberar, pronunciando a poco un veredicto de culpabilidad, apreciando el delito de asesinato, siendo condenado por el Tribunal de derecho a la pena de cadena perpetua.

         José García Díaz. A.H.P.H.



 

lunes, 2 de noviembre de 2020

Apuntes para el coto del Villar y del Avispero.

 

                                                          


                                                        

   

    Por disposición del Sr. jefe de la Administración económica de esta provincia de Huelva y en virtud de las leyes de primero de mayo 1855 junto con la del 11 de Julio de 1878 se dan instrucciones para su cumplimiento, para sacarla a subasta en el día y hora que se dirán las fincas siguientes:

   Remates para el día 3 de diciembre de 1880, de las 12 a una de la tarde, en las casas consistoriales de esta capital, antes el señor Juez de Primera Instancia de este partido y escribano don Vicente Muñoz Caballero.


                                            PARTIDO DE MOGUER

                                      

                                 Bienes de Corporaciones Civiles.

                               Finca Rústica. = de Mayor Cuantía.

                          Montes Propios de la villa de Bonares.

   Con el número. 881 del 2º inventario. Se destaca un partido de 1828 hectárea, 81 área y 45 centáreas, o sean 2840 fanegas de tierra del marco de Castilla poblado de monte bajo de lenticas, sitio el Villar, término de Bonares que linda por el Norte desde el Bermejo que está al Este se encuentra próximo a una choza pequeña y una era que tiene enfrente el paraje conocido como los Vuelos y siguiendo en línea recta pasa por un bermejo que está junto a la cañada de las “Palomas” y en la misma recta continua el arroyo de Don Gil; por el Este el bermejo que está al E. de la cabezada del paraje citado de los Vuelos, cogiendo recto pasa por el alto de la “Palomera” y va a la Mogea Alta, y desde al mojón del coto de don José Carrasco, que está al pie del Cabezo Colorado propiedad del citado señor anteriormente hasta de nuevo al arroyo Don Gil este terreno es de inferior calidad útil solo para pastos y rozas. Esta finca tiene abrevadero con agua permanente, y es atravesada por el camino que va al Villar a la Rosina y el que llaman los Playeros. 

    Así mismo hace de servidumbre o camino que desde el convento de la Luz de Lucena desemboca por los vuelos a la cabeza de la Palomera en dirección hacia a, término de Almonte; además lo atraviesa en la mayor parte la vereda de carne que el sitio del Villar, baja al Sudeste, dejando al Este el arroyo del Villar entrando en el coto de don José Carrasco, próximo a donde en dicho coto entra este arroyo, además las veredas de servidumbre que hasta la fecha tenga. Se encuentra apreciada en 11.360 pesetas por la que sale a subasta.

   En el mismo lote, con el n. 88 2º. Un partido de 834 hectáreas, 24 áreas y 52 centiáreas, o lo que es lo mismo 1.295 fanegas, 6 celemines de tierra, del marco de Castilla, poblado de montes bajo, y en algunas cañadas árboles frutales de distintas clases, en el sitio llamado “Avisperos”, término de Bonares, que linda por el Norte con el mojón de piedra que está próximo a la esquina de los huertos del Hambre, a otro que está en la cabezada de la huerta del Moyita, de este a otro que está junto al camino del Villar, de este a otro de la dehesa que está junto a la huerta Bernardino y que da vista a la cañada de los Lobos de este a otro de las huertas de las Veredas, y de esta a la próxima huerta de Olalla; por el coto de don Nicolás Gabriel hasta la piedra que da vista a los huertos del Hambre, y por la forma linde con el coto citado hasta el arroyo del Avispero, y por el Oste desde el mojón de las huertas de las Veredas hasta la huerta de Olalla, y desde aquí hasta el pinar del médico Cordero, de donde toma la corriente del Avispero.

                                                     

    Las dos fincas fueran compradas, mucho más baratas del precio de tasación, por don Mariano Suarez  Martin Alcalde de esta villa. Hijo de uno de los mayores hacendados de este pueblo, don Mariano Suarez Díaz, Regidor Síndico, suegro de don José María Carrasco "El Patuo". Murió el 12 de febrero de 1871.

   Esta finca es atravesada por el camino vecinal de Moguer a Almonte. Donde la servidumbre tiene establecida para todas las fincas de dominio particular. Además, es conocida una vereda de carne para el paso de la ganadería, la cual sale de la villa de Bonares por la vereda del arroyo de la “Pasada”, siguiendo la dirección que hoy tiene, la que sirve a los huertos del Torvisco hasta llegar a las aguas del Avispero donde entra el partido de la “Palomera”. Están exceptuadas de la venta y no se han comprendido en la cabida señalada de la 36 fanegas y 10 celemines de terreno, con diferentes clases de cultivos de dominio particular; hallándose una fanega en la cañada del Gabatón o del Hambre, 4 con 2 en el Hornito, 10 en la cañada del Agua, 6 en el Torbisco, 7 en la cañada del Lobo y una fanega y media en la Gavia Hondilla.  Fueron valoradas estas dos fincas por don Luís Arcadio Martínez, Ingeniero Agrónomo, y don Pedro Chaparro Velo, práctico en 5.807 pesetas por la que sale a subasta.

  El Gobernador interino don Antonio María Doz.

A.H.P.H.

  José García Díaz.

sábado, 31 de octubre de 2020

La costa de Castilla.

 

                                                      


      Por el Ingeniero de Montes, don Luís Moreno y García. Sobre la desecación de las marismas de Huelva.

En Madrid el 29 de marzo de 1881.

En el célebre monasterio de la Rábida, que se levanta en no muy elevado otero donde concluyen los ríos Tinto y Odiel al Sur de Huelva, tiene como principio la “Costa de Castilla” que se extiende hasta la desembocadura del Guadalquivir, frente a Sanlúcar de Barrameda. Cierra por Sur un extenso territorio, poco conocido, y menos estudiado, en el centro lo forma una extensa faja de pinares de la especie Pinus Pinea, menos propia de esta latitud, clima y suelo que la maritíma o pinaster que mezclada de alcornoque y acebuches, pertenecen los pueblos de Moguer, Lucena del Puerto, Almonte e Hinojos, de esta provincia y limitando al Este y Oeste por las marismas arcillosas del Guadalquivir y las silíceas de Huelva.

   Este extenso desierto, de unos 70 kilómetros de longitud y 15 de anchura, no tiene actualmente población alguna ni aun vivienda de ninguna clase. La más espantosa soledad reina en aquella verdadera pampa española, no animada por las esquilas de los ganados, los cánticos de los labradores ni aún los trinos de las aves cantoras; es el silencio del Sahara se percibe allí constantemente, alterado tan solo por el ronco estridor de las olas del mar batiendo la costa.

   Su suelo es poco accidentado; llanuras extensas con algunas colinas de ancha base, las cuales, eslabonándose, forman ondulaciones que se levantan poco metros sobre el nivel del terreno, y cierran depresiones en que se acumulan las aguas de lluvia para formar lagunas, charcos y turbales, que al desecar por la acción del calor llenan el aire de emanaciones palúdicas, productoras de las fiebres perniciosas a cuyo destructor influjo no escapa el que se aventura en aquellas regiones alguna temporada.

   En la parte austro—oriental, en una extensión de más de 40 kilómetros de longitud a lo largo de la costa, la acción de las aguas del mar acarreando materiales silíceos, mezclado con resto de conchas, combinada con la energía del viento, ha dado lugar a la formación de cerros cónicos de arena, que, unidos por sus bases, forman un dédalo inextricable de montículos cuyas cimas volcadas por el viento huracanados, que sopla frecuentemente del África, adquieren un muy marcado movimiento de avance al interior, siendo conocido en el país este territorio, así formado con e nombre de las “Arenas Gordas”; y los montes arenosos de alguna extensión tiene nombres como los de Médano de la Retuerta, Charco del Toro, etc. que son otra cosa sino los que los franceses llaman duna, por ignorar los nombres de médano, mégano y medaño en nuestro país tienen estas formaciones.

                                                                


   En estos médanos, formado de arena fina, con exclusión de arcilla y calizas, solo vegetan algunos pinos piñoneros, P. Pinea L., raquíticos en general, unos casi enterrados en la arena, que no presentan al exterior más que sus copas de color verde oscuro, otros hundidos hasta las bifurcaciones de sus ramas madres, raros ejemplares de enebros y espinos, algunas matas de jaguarzo, cantueso y brezos, especialmente en las inmediaciones de los tollos, agujeros circulares en cuyo fondo existe agua cenagosa y fétida.

    El resto de esta estéril comarca, no ocupada por los médanos, está constituida por un suelo arenoso también, con poca arcilla, menos caliza, y casi ningún mantillo, que son los cuatros elementos esenciales de los suelos laborables; pero en muchos sitios descansa sobre un subsuelo excesivamente arcilloso, y por tanto eminentemente impermeable al agua, circunstancia preciosa para con el auxilio poderosa de la agronomía poder dedicar al cultivo agrario permanente en tan vasta región, cuando la iniciativa particular o empresa potentes piensen en tan lucrativo asunto.

    Como en todos los suelos arenosos el calor obra aquí sobre la arena, cuerpo muy reflector, pues que cada faceta de las que presentan el deformado cristal silicio es para la onda de calor un espejo, y de la infinita serie de reflexiones ejercidas sobre ellas, se forman a muy pequeña altura del suelo focos que, elevando la temperatura de la capa aérea inferior, producen la desecación del aire y la muerte de las plantas.

   Además, el aire atmosférico, así como los productos resultantes de la descomposición de las sustancias animales y vegetales que el suelo activo puede contener, no son retenidos en el, por su permeabilidad, para contribuir poderosamente a la nutrición de las plantas, pues sucede que gases y vapores les abandonan y se difunden en el aire, pasando a las capas superiores fuera del alcance de las plantas.

  Por lo cual este suelo es excesivamente suelto, seco, muy permeable para con el agua, el aire y los gases procedentes de la descomposición de las materias orgánicas, y con todos los caracteres comunes a los arenosos, y sería completamente impropio para el cultivo agrario permanente, a no ser por clima benéfico de la Bética, en que se halla, y por la propiedad citada de descansar sobre un subsuelo arcilloso, de cuya cualidad participa en diversos lugares el suelo inerte.

                                                                 


   Lo dicho hasta para deducir la pobreza de su flora. Algunos alcornoques en el coto de Doña Ana, o Doñana; escasos ejemplares de pinos, no porque las condiciones del terreno no se presten para la vegetación de este árbol, verdadera providencia de tales terrenos, como lo prueban los magníficos ejemplares del pino de la Corona, cuyo tronco mide tres metros de circunferencia, el Torice o del padre Céspedes, de cinco metros, y varios otros que se ven en  el monasterio de la Luz y dehesa del Estero; si no por la mala voluntad e incuria de los hombres; variadas especies de planta del género Cistus, algunos brezos, retamas, enebros, zarzas, helechos y gamones en las inmediaciones de los charcos, son los vegetales que se encuentran en aquellos solitarios sitios.

    Las condiciones del suelo, clima y situación de esta región, la hacen apta para vegetación del pino negral o marítimo, en primer lugar, que podía transformar las vastas soledades de los médanos en verdaderos vergeles, como se ha hecho en las Landas de Burdeos. La vid encontraría fuera de los médanos, admirables condiciones para desarrollarse, rindiendo buenos beneficios a los plantadores, que tendría fácil salida a productos por los puertos de Huelva, Palos y Sanlúcar de Barrameda, obteniéndose seguramente frutos análogos a los que recolectan en los limítrofes términos vecinales de Hinojos, Almonte y Moguer, que se exportan como de Jerez.

     El olivo vegetaría admirablemente en muchos pagos, como lo prueba al existir lozanos y robustos algunos ejemplares de acebuche u olivo silvestre en varios sitios de la comarca, especialmente si se aprovecharan para cultivo los puntos más a propósitos; y en general, todos los árboles propios de las zonas templadas, renderían productos notables, con lo cual no solo aumentaría la superficie agrícola de España con algunos miles de hectáreas, si no que, poblando aquellos solitarios lugares, cubriendo el blanco suelo de verdes plantas, e impidiendo el avance hacia el interior de las invasoras arenas de los médanos, se modificaría en parte el clima extremadamente seco de la parte meridional de la provincia de Huelva, y occidental de la de Sevilla.

       Para obtener tan grandiosos resultados, no puede prescindirse del concurso de la ciencia agronómica, que es la que enseña a dónde y cómo se han desecar las lagunas y turberas; en que terrenos se deberán aplicar los avenamientos o drenajes para sanearlos; cuando se emplearan los arados subsuelos para hacer des fondos los grandes de vertederas para mezclar la arcillas que constituyen la capa impermeable con el suelo activo e inerte y para transformar las arcillas, insalubres y triste llanuras de que nos ocupamos, en fértiles, pintorescos y productivos vergeles. Vasto campo es el que señalamos a la actividad de las grandes empresas agrícolas, que es seguro se constituirán en nuestro país, para explotar con gran provecho nuestro no muy atendido suelo, así como iniciativa particular, y si conseguimos llamar la atención hacia aquellas extensas soledades de la costa de Castilla marismas de Doñana, daremos por bien  empleado el tiempo que, en las vacaciones de nuestro territorio, defiriendo gustosos a las excitaciones de nuestro queridísimo y respetable maestro y amigo Sr. Abela, que nunca ceja en el generoso y noble afán de alentar a los que nos dedicamos al difícil estudio de la ciencia agronómica.

    José García Díaz.

miércoles, 28 de octubre de 2020

Un asesinato que terminó en leyenda.

 

  

 

                                                                 


 

  Nota de prensa del día 1 de marzo de 1894, en el diario La Provincia:

  Ayer, ante la sección segunda y ante jurado, vióse la causa incoada en el Juzgado de Moguer contra Vicente Garrido Molín, por el delito de homicidio en la persona de José Pérez Coronel, perpetrado en el pueblo de Bonares el pasado mes de abril.

   Por el veredicto del jurado le fueron apreciadas las circunstancias atenuantes de embriagues no habitual y las de arrebato por obrar bajo el impulso de una agresión, y en su consecuencia el tribunal de derecho impuso al procesado la pena de ocho años y un día.

    El defensor, señor Sánchez Mora, estuvo siempre elocuente en su discurso, principalmente en la parte en que trató de probar que el hecho no fue ejecutado con abuso de fuerza, agravante solicitada por el Ministerio Fiscal.

    Expediente nº 7.569 del A.H.P.H. Sobre las Sentencias de la Audiencia Provincial de Huelva, desglosado: Tribunales.

                                                               


  Los señores que han compuesto el citado Tribunal de Juzgado este cuatrimestre, correspondiente al distrito de Moguer y residente de la villa de Bonares que han participado en este sumario, presidida por el Juez señor don Felipe Carrasco.

  Don Alejo Diego Quintana; don Laureano Moreno Ponce; don Francisco Becerra Barrios; don Rodrigo Feria Vázquez; don Pedro González Rodríguez; don Lázaro Soto Bautista; y de suplente Ignacio Vega Moreno.

   Que los hechos ocurrieron el 12 de abril. Sobre las 11 de la noche en la posada de Alejo Diego Quintana. (Esta pensión regentada por el citado Alejo en contrato de alquiler, era de propiedad de don José María “el Patuo” y se encontraba situada en las Cuatro Esquinas, para pasar a ser tiempo después la taberna de José María “El Chirro”. Luego este salón pasó a ser escuela particular de la mano del maestro y alcalde local don Guillermo López Ugena y don Juan Avilés; para terminar de almacén de frutas, dirigido por el industrial Manuel Pínguele para terminar como la ermita de la Cruz de la Cuatro Esquina).

   Que los hechos resaltan, que la situación se alteró entre los dos individuos además del vino había por medio, una apuesta indecente comprometiendo aun familiar determinado y de ahí se llegó a la navaja certera. Lo demás lo aportó el ilustre abogado el señor Sánchez Mora, reconocido en toda provincia por su buena minuta y su buen saber de la abogacía.

  Se resalta también, que es uno de los primeros atestados que lo tuvo que desarrollar la Guardia Civil en este pueblo.


                                                                 


   Ya que 7 años antes, el jueves día 23 de agosto de 1887 el Ayuntamiento de esta villa, recibió la siguiente circular gubernativa: “Se aprueba el establecimiento de la Guardia Civil con un número de cinco individuos. En donde este municipio aportará todos los recursos necesarios que dicta la ley”.

  Destinaron para este fin la casa- cuartel de la familia Carrasco, que durante tantos años pernoctaron estas unidades, hasta los años 90 del siglo pasado.

 

     José García Díaz.

domingo, 25 de octubre de 2020

Las marismas y la Primera República.

 

                                                               


 

 Del diario El Gobierno del día 23 de Julio de 1874.

MINISTERIO De FOMENTO.—El presidente del Poder ejecutivo de la República, de acuerdo con lo propuesto por la dirección general de Obras públicas, lo dispuestos, con fecha del día 13 de este mes, que dejé en suspenso la resolución de los expedientes de petición de los terrenos de las marismas de Huelva, continuando solamente la tramitación de los que estén incoados hasta que se forme un plano general de los terrenos de aquella clase, en el cual se señalen los trozos concedidos y los solicitados, y se estudie u proyecto completo de saneamiento comprendido las secciones en que pueda dividirse para otorgar su concesión y las bases a que se han sujetar las obras para la realización de aquel proyecto. Ha dispuesto así mismo que se exceptúen de la anterior prescripción las peticiones que tengan por único objeto ocupar algunas partes de las marismas para la ejecución de una obra pública, concediéndose en tal caso solamente la parte de terreno necesaria para el establecimiento y explotación de la obra.

   Toda esta buena disposición, antes medio años que terminase la Primera República federal española en donde quebraría la Banca a favor de aumentar los nuevos capitalistas acompañados de los latifundistas que representaban la nobleza y el clero, que eran los verdaderos propietarios de las mayores partes de las tierras de esta provincia.

       Las compras de los llamados Bienes Nacionales, se destaca uno muy singular publicado por un diario sevillano el 13 de diciembre de 1891, donde  se comenta que el señor Conde de París ha extendido considerablemente sus posiciones de Villamanrique, con una importante compra que acaba de hacer, colindando con sus primitivos terrenos.

        Una de ella es el coto llamado “Lomo del Grullo”, en donde existe un gran caserío del tiempo de los Reyes Católicos, conocido con el nombre del Palacio del Rey, finca de una gran superficie y de gran utilidad para la caza, a cuyo fomento lo dedicaba el Señor Conde de París, que como es bien sabido, es un entusiasta por esa afición y unos de sus protectores. A demás ha incorporado a este coto las marismas llamadas de “Hinojo” y la de “Aznalcázar”.

     Estas tres fincas una superficie de cerca de unas 60.000 hectáreas, de las cuales, 8.500 de estas pertenecen al citado coto del “Lomo del Grullo”, que lo dedica a la caza y al arbolado dedicando las marismas al pasturaje del ganado de los pueblos inmediatos.

   Las tres fincas se unirán a la dehesa del “Gato” que pertenecía a la S. A. formando de esta suerte una sola finca de unos 45 kilómetros de longitud y más de ancho (unas 60 lenguas cuadrada aproximadamente). Lo que hace que el Conde de París tenga la posición de tierra más extensas de toda Andalucía.

   El año siguiente en el mismo diario con el título siguiente: “El Coto se Oñana”.

    Este coto es quizá por su extensión y abundancia de caza sea el más importante que hay en España y Europa occidental y central y seguro que es el más conocido entre los “sportmen” ingleses que viajan a nuestro país. Se han celebrado en el cacerías de gran renombre; tal la verificó para agasajar a Felipe IV y que anda escrita en crónica e historias y es el mayor ejemplo de fastuosidad que ha podido dar la antigua opulenta nobleza en obsequio de su soberano. Dicho coto de Doña Ana o “Oñana”, antigua propiedad del ducado de Medina Sidonia, arrendado actualmente por los señores Gualterio Buk, don Alejandro Williams y don Pedro Noriega González, “spormen” de Jerez y anfitriones de grandes cacerías, a las que suelen concurrir sus amigos de Inglaterra.                  

                                                             


   En Doñana se caza el venado y el jabalí, la chocha y la perdiz, el pato y la agachadiza, el conejo y la liebre, la codorniz y la tórtola; la caza de monte y la de agua; cuanto desea el cazador en sus fantásticos delirios y sus ansias incansables. ¡Que más ¡Pudieran cazarse camellos y dromedario en cuyo suelo feraz y totalmente africano se reproducen, como realmente se cazan burros salvajes a lazo, ni más ni menos como se hacen con los caballos en las Pampas! Burros, si, no lo duden los pacíficos cazadores de alondras y pinzones. Una de las cosas que más divierten a los que cazan en el coto es ver manadas de sanos cimarrones o remontados, que huyen del hombre como diablo de la cruz. Cuando los guardas necesitan alguno para sus menesteres procuran cazarlo a lazo, y a duras penas se somete al yugo de la domesticidad.

                                                                

                                                            

El Conde de París.

  Otra particularidad de Doña Ana. Los gatos cervales o monteses están acotados; los dueños de la posesión les han declarado inviolables; es una de las condiciones del contrato del arrendamiento les pone a cubierto de las escopetas, trampas, el lazo y el veneno. Y claro está, hay peste de ellos, y con su fuerza ingénita y sus mañas destructoras no dejan con vida una perdiz, ni un pato, ni un animal de los que se ponen delante de sus guarras. ¿Porque esta idea? Se preguntarán algunos lectores; ¿a qué conduce eso de rebajar la caza fina de ratas de montes y convertir el florón venatorio de la casa Medina sidonia en una inmensa gatería? Sencillamente porque Jhon Bull de desvive por cazar gatos cervales, y los propietarios de la finca aspiran a tener cazadero “sui generis” en España que es admiración de los ingleses, aun más de lo que ahora lo es.

    En cambio, y váyase el bollo por el coscarrón, se sigue la buena costumbre de no tirar a las ciervas como lo hacen los señores Calvo de León en “La Mezquitilla”, y todos los propietarios de “Forest” en Escocia, y todos los cazadores en terreno libre o ajeno, pero no se debe hacer ni consentir en los propios.

 

   A la montería que se dio en febrero último asistieron cerca de veinte aficionados, ingleses y andaluces, y en cuatro días se mataron 16 reses y alguna de caza menor. Por poca por motivos de los citados gatitos montañeses. La nota más saliente de esa montería fue el haberse matado una “Cochina mayor” sin señal alguna de colmillos ni de haberlos tenido, escapada hace meses del corral de unos de los guardas; pero en cambio tuvieron que echar los suyos los ojeadores para encontrarla y matarla. Mientras la montería que se celebró en marzo concurrió don Joaquín Rivero, don Pedro N. González y don Carlos H. Younber, donde le entraron al señor González nada menos que ocho venados uno tras otros, casi todos coronados, de los cuales a tiro de rifle, mató dos hirió otros dos que, por mucho que siguieron, no pudieron cobrar. Que se sepa nunca en las se ha dado un episodio semejante.

  José  García Díaz.

 

 

 

viernes, 16 de octubre de 2020

Los primeros soldados de Bonares, que pisaron tierra africana.

                                                               


                                                                                          

 La Guerra de Margallo.

     Llamada así a la primera Guerra del Rif, que comenzó en el año de 1893 hasta el 1894, duró poco esa guerra española en Marrueco, ya que la primera ocurrida hacía más de treinta años atrás, se había quedado ya olvidada en casi toda España, pero  en este nuevo conflicto bélico se vuelve a derramar sangre española allende del Estrecho, dado que en breve tiempo de dos días, marcó parte de la historia de este pueblo en donde por desgracia murieron una quinta completa de 14 mozos y más 5 de la anterior, ya que podemos creer que este pueblo quedó metido en una profunda amargura y sufrimiento para las madres bonariegas; pero como los sentimientos con el tiempo suelen quedarse en el olvido, dado que luego llegó la Guerra de Cuba y las nuevas y continuas con el moro africano.

    Los 260 soldados de esta provincia, unos 160 se incorporan al Regimiento de Extremadura que se encontraban de guarnición en Jerez de la Frontera, en donde habían recibido órdenes de estar preparado para marchar para Málaga al primer aviso. Mientras el de Borbón, ya llevaba días en Melilla.

   Pero que es lo que produjo este enfrentamiento, llamado “Guerra de Margallo”. Puesto que este militar ejercía como gobernador de esta plaza, el señor Juan García Margallo.

   Y todo comenzó por una rutina de fortalecer un cuartel en las afueras de Melilla, donde el grupo de Ingenieros realizaban unas trincheras, cerca del cementerio y de la mezquita de Sidi Aguariach dieron con o sin conocimiento con la tumba de un moro llamado “Santón Puntilla” y la destruyeron. El saqueo de la fosa provocó que los moros que vivían y trabajaban para España, avisaron y calentaron la situación a los jefes de las tribus de los alrededores.

   Provocando que el 2 de octubre, fueran atacados los soldados que mantenían la vigilancia y la protección de sus compañeros de trabajos. De  hay es donde comenzaron los enfrentamientos que costó la vida en toda la campaña a más de 9.000 españoles.

                                                              


        Al amanecer del 27, 28 y 30 de octubre este batallón mandado por el capitán Parra junto al teniente don Miguel Primo Rivera con el sargento mayor Laureano fueron sorprendido por más de 6.000 bereberes, que portaban unos de los mejores y modernos fusiles aportados y vendidos por los ingleses para este fin como casi siempre ha ocurrido a lo largo de la historia. Entre el Regimiento Extremadura, el de Borbón y el de los Cazadores de Cuba dejaron en los barrancos y en las cimas enrojecida por sangre en la “Cabrerizas” y en “Rostro Gordo” a más de 500 soldados de Huelva y Provincia, entres fuertes combates de bayonetas cuerpo a cuerpo con los moros. Soldados que pensaban que para pasar de recluta a veterano no necesitaban nada más que una batalla, en las que tanto sobran las balas como faltan los garbanzos y las patatas.

  Son los siguientes soldados muertos del Regimiento de Extremadura en combate el amanecer del día 27 de octubre:

1º Francisco Domínguez Domínguez, de profesión del campo hijo de Juan Dominguez y de Manuela Domínguez de la calle Rosal.

2º Cristóbal Martín Caballero, del campo su madre Lucía Caballero y su padre Vicente Martín de la calla Santamaría.

3º José Martín Aguilar, del campo de la Fuente.

4º Pedro Rivas Ramos de la calle San José.

 5º Juan Antonio Carrasco Moro, del campo de la calle Esperanza su madre María del Rosario Moro y su padre Juan Antonio Carrasco.

 6º Antonio Martín García de la calle Ruiseñores, del campo su madre María Díaz Quintero y su padre José Martín.

7º Francisco Martín Díaz, albañil de calleja de la Iglesia.

8º Juan Molín Borrero, tabernero de la calle Hospital.

9º Manuel Martín Padilla, del campo de la calle Huerto.

  Los del Regimiento Borbón muertos en la misma noche de los anteriores:

10º José Vega Martín, herrero vivía en La Fuente.

11º José Vega Riquel del campo y primo hermano del anterior, vivían en la calle del Huerto en la misma casa.

12º Diego Carrasco Toro.

13º Ildefonso Barba Mora.

14º José Domínguez Rodríguez.

                                                      


                              Del Regimiento de Cuba.

15º Celedonio Bueno Carrasco, del campo de la calle Santamaría.

                 Del Regimiento Cazadores de Cataluña.

16º Agustín Velo Martínez.

17º Francisco Hilazo Martín.

18º Diego García Iglesia.

19º José Barriga Camacho.

   Se libraron los cinco mozos afortunados a los que sus padres pagaron a la Caja del Tesoro las mil quinientas pesetas del importe de la redención de cada uno de los que se quedaron en casa y buscaron un sustituto para su reemplazo

Están también redimido del servicio activo militar por la suma de 3.500 reales por Escritura Pública los siguientes quintos:

Manuel Carrasco Barriga de la calle Esperanza.

Juan Manuel Conejo García de la calle Larga.

Juan de Vega Querido de la calle Esperanza.

Y aquellos tres que se encontraban en situación de penalidades en la familia. Se le otorgaban por las autoridades locales evitando la corporación a la fila.

       Mientras el amanecer del día 2 de noviembre desembarcan en el puerto de Melilla, la caballería de los lanceros del Regimiento de Dragones de Santiago, temido por los moros viejos, puesto que en la guerra africana anterior lancearos a miles de ellos en la batalla de Tetuán. Pero esta vez el enemigo no llevaba espada y gumía, si no fusiles máuser que en manos de experto tiradores mahometanos traían locos a los soldados españoles.

     El día siguiente prestaron servicio de vigilancia, donde lo primero que hicieron era cambiar los cascos por la gorra para evitar que los moros hagan blanco sobre el reflejo del metal; fueron tiroteados por la noche y de regreso a la compañía fueron alojados de mala manera en el cuartel de Mantelete.

                                                         


      Estaban cumpliendo el servicio militar con ellos dos bonariegos con más de tres años de servicio, el cabo primero Cristóbal Carrasco Romero y Francisco Becerra Martín. Donde fueron ascendidos en poco tiempo después.

  Tras el acuerdo del pleno de 15 de noviembre el Ayuntamiento junto con su alcalde don Pascual María Carrasco Guzmán acordaron lo siguiente, con gratificar con 50 pesetas a todo soldado vecino de esta población. Así con 150 pesetas a aquellos que sean herido y queden inútiles.

    Dar un socorro de 250 pesetas a las familias de los soldados de esta villa que fueron muertos en batalla o en los hospitales a causas de las heridas recibidas en combates.

   Podrán ocupar en los empleos municipales, con preferencia a otros, a los soldados que hayan jugado su suerte por esta villa, y sean heridos o inutilizados en Melilla.

 

 José García Díaz.

 

viernes, 9 de octubre de 2020

El bergantín inglés Affirws.

 

                                                       


 

   El Departamento de Marina de Cádiz.

   Siendo el jueves día 27 de agosto de 1880. Teniendo información de que el navío ingles Affaires, salió de Gibraltar días antes con un cargamento de tabaco de contrabando con destino la playa “Los Asperillos de Almonte”. Se le comunica al señor Capitán del cañonero guardacostas Arlanza don Francisco Castaño, que guarde medidas de seguridad y pase a la detención del citado bergantín.

   El navío inglés, al mando del Capitán Pittier Morgan era un gran conocedor de las costas de Doñana, cómo se demostró en el sumario instruidos antes el Tribunal Supremo por ser un implicado en más de una ocasión en el contrabando, y en donde se demuestra la complicidad de varios carabineros de la abandonada Playa de Castilla.

      El día 30 de agosto por la noche se observa el bergantín con rumbo para la descarga a la orilla  con el citado contrabando ; siendo observado por la marinería del Arlanza una señal de lumbre de aviso que partía de los montes cercanos. En la primera descarga por parte del cañonero Arlanza, se detiene por completo toda operación de trabajo por parte del navío inglés, que siendo detenido y conducido al puerto de Huelva. Donde le esperaba el segundo comandante de la Marina don Federico Aguilar para revisar el cargo que traía a órdenes, venía una partida de cincuenta bultos de losetas las cuales en su mayoría ha resultado ser rellenos de tabaco picado y prensado en libra y media de la famosa marca “Zorrilla”, haciendo un total de mil libras.

  La ventaja del contrabando del tabaco inglés, sobre los españoles dado las prestaciones se dan el precio inferior al español y de mayor calidad. Contando que el tabaco que se fabrica en Sevilla en la actualidad se expende en esta ciudad y la de Huelva, es de los más que pude darse por nefasto. La cajetilla de 35 céntimos, no es posible poderla fumar (ya que un jornalero de aquellos días, recibían un salario diario era de unos 10 a 12 reales), y no es sólo por el tabaco que henos dicho es malo, sino también por el papel, pudiéndose demostrar que de los 25 cigarrillos que tiene la cajetilla, sólo se pueden aprovecharse la mitad.

                                                        

              Media libra de tabaco de picadura de 1ª clase del año de 1888 propiedad de José García.


    En la Delegación de Hacienda, se dicen que en vista de las muchas quejas del público han llamado la atención a la superioridad que hasta ahora no se haya buscado una solución.

   Estos hechos produjeron que el señor don Miguel Barroso, Administrador de Aduanas abrieran expediente, sobre un carabinero  en la Comandancia  del Reyno destinado por la playa de Castilla fuera detenido y procesado en Consejo de Guerra por participar en complicidad de estos hechos y en caso anteriores.

  Dando a que este consejo ha existido el teniente auditor señor Tovar, llegado el día anterior de Sevilla.

                                                            


  Se da la paradoja que el mismo cañonero Arlanza, semanas después apresan un falucho en aguas de Ayamonte el 23 de septiembre cargado de contrabando, donde de los siete tripulantes, seis de ellos eran portugueses.

    La mercancía retenida se componía una carreta cargada de fosforo que fue trasladada para Huelva, acompañado el detenido supuesto propietario de la mercancía.

   El cañonero guardacostas Arlanza prestaba servicios costeros desde hacía años entre las costas de Ayamonte hasta Sanlúcar. Pertenecía la denominada de doble hélice de 3º clase, esta embarcación tenía una eslora de 24 metros, con poco calado, desplazando unas 86 toneladas con un armamento de dos cañones rayados de 120 mm. Mientras mantenía una velocidad de 9 nudos y disponiendo de una carga de 10 toneladas para los 80 Cv. Efectivos de potencia. Su tripulación la componía 23 hombres.

    Su capitán Francisco Castaño, que con el tiempo fue Ayudante de Marina y Capitán del Puerto de Huelva.

   José García Díaz.