La entrada de Zoco.
Además de decir
que era de un pueblecito de Huelva, que estuvo rastreando por los bajos fondos
de esta bella ciudad Africana, en los tiempos aquellos oscuros que era centro del espionaje mundial, reflejadas
en multitud de libros novelas y cono no en el recuerdo la películas tan entrañable
como la de "Casablanca"; o la curiosa serie de televisión como fue " Tiempo de
costura".
Hacia un par de año
atrás en una famosa revista madrileña, del 3 de Marzo de 1934,comentaba que el
espionaje era unas de las causas misteriosas de muchos conflictos sociales y
políticos, comentaban el comandante Ladoux, antiguo jefe de los Servicios de
Espionajes y Contraespionaje francés en la Gran Guerra.
"Se puede
asegurar que el Mundo se halla actualmente en plena guerra secreta. España, con
sus costas recortadas y, en muchos lugares, desiertas; con su situación
geográfica excepcional, a caballo sobre el Mediterráneo y el Atlántico, es con
sus islas, una de las bases principales para una futura guerra submarina".
Curiosa predicción cinco años de empezar la segunda Guerra Mundial.
Esta nota está
recogida en fotocopias del Diario de la Gazeta de Tánger en un archivo Melilla, donde allí le dan la importancia que
se merece como una pequeña anécdota de poco valor histórico y en donde me la
ofrecieron mis estimados amigos que he dejado en esa bonita tierra.
Fueron además algunos diarios de la Península los que comentaron esta curiosa historia de que
como espías rusos, intentaron revelar a las tribus marroquíes para anular la
acción del Ejercito nacionalista en España.
En una famosa revista del aquel año de 1936.
La noticia
comienza con una carta a un diario onubense Odiel el día 14 de Agosto de 1936 de
la siguiente manera:
Sr. Director.-- Soy una hija de la provincia
de Huelva, y recibo diario la prensa de esta capital. Como hija de Huelva,
estoy agradecida a usted, que he venido a mi amada ciudad a poner la prensa
en muy alto el crédito del pueblo que me
vio nacer. Yo le estoy muy agradecida repito, y quiero contribuir al esfuerzo enviándole
unas notas para un reportaje.
Lea usted la nota que le adjunto y dele
una forma periodística.
Muy agradecida le saluda un verdadero
admiradora de su diario. N. L.
En esta mañana
se ha recibido loa siguiente nota en la redacción de este periódico con la
siguiente información.
En estos días se
han publicado en los periódicos de Tánger, una pequeña y simple noticia, dando
cuenta de que había sido sustituido un comisario de policía de este puerto, siendo
reemplazado por un funcionario de la policía italiana.
A primera vista el
hecho parecía no tener importancia y sin embargo la forma que estaba hecha sustitución me hizo
ponerme en guardia y pensar sobre el asunto.
El funcionario
destituido en el ambiente público tenía una significación de extrema izquierda.
¿Porqué había sido sustituido de un modo fulminante por un policía italiano de
extrema derecha y de afiliación fascista?
El hecho en
estos momentos y dada la situación internacional y especialmente las
derivaciones que en Tánger venía teniendo los acontecimientos de España, me
parecía un poco extraño. Y, claro está, pensé que algo no se decía claro, pero
de extraordinaria importancia, encubría este hecho tan sencillo que la prensa tangerina
daba cuenta de un modo tan conciso y breve.
POR LA TANTO, ME
PUSE EN BUSCA DE NOTICIAS Y ME DIRIJO AL ZOCO CHICO; LUGAR DE REUNION DE ESPÍAS
Y MALEANTES DE TODOS LOS PAÍSES DEL MUNDO.
Con este propósito
me he vestido convenientemente y me dirijo al Zoco Chico de Tánger, lugar
citado con las característica anteriormente mencionadas y de cómo suele fraguarse las conspiraciones que luego
cambian los perfiles de un país determinados.
Allí, por mi cargo,
claro, es normal que no lo especifique,
tengo yo montado también mi particular servicio de espionaje. Y a unos de estos maleantes que se encuentran a mis
servicios me dirigí directamente. Entablo con el conversación. El y yo nos
entendemos difícilmente; dice que es austriaco, pero lo cierto en que no hay
que le entienda la endiablada jerga que habla cuando él no quiere hablar. Un
billete de cien pesetas enseñando a tiempo le vuelve elocuente.
Y en esta feliz
disposición entramos en uno de los café de aquella plaza tangerina, tan pintorescos,
tan evocadores y tan llenos de figuras exóticas, de vestiduras pintorescas y de
inquietantes miradas de recelos.
-----¿Que va ser?.--"Whisky".
No lejos, en una
mesita, saboreando un licor amarillo que debe ser "chartreusse",
claro que, desde luego un licor francés raro, una inquietante figura de mujer
elegante y hasta bella, si la expresión de aquellos ojos azules suyos no
produjera en el espíritu una impresión de escalofrío. Le hago una seña amistosa
y viene a nuestra mesa.
---Ilma, ¿tomas algo?
Y con un gesto
aburrido por toda contestación dice:--"Whisky".
Hábilmente he
procurado sondear los recovecos tenebrosos de estas latitudes y, como quién no
quiere la cosa, como sin darle importancia dije:
---Han relevado al comisario de Policía. Cuatro ojos fríos e
interrogantes se ha clavado en mi persona, produciéndome un escalofrío, y
seguidamente después de un corto silencio, es la mujer quien dice:
---!Bah!, para entendernos tienes que hablar claro, en
español.
Su voz era fría,
lacerante, y sus ojos azules cambiaron con mi espía una mirada inteligente.
Esta me dice:
----Hablemos claro. ¿Qué quiere saber?.
---El porqué han destituido a este comisario. Me ha parecido
que en el fondo de este asunto había algo mucho más interesante. ¿ Más claro quieres que hables? Por toda
contestación dice la mujer.
--- ¿Que das por informe?
Pronto nos hemos
entendido. Pues cuestión de más o cuestión de menos, total, unas pesetas.
Gracias a ellas he sabido también estas cosas graves que voy a dar a conocer a
los lectores de este diario de Huelva.
UN DIA NORMAL LLEGA
A TANGER UN TRIMOTOR MISTERIOSO.
Hace unos días había
llegado el trimotor a esta ciudad citada. El aparato era de perfecta factura de
fabricación y de gran potencia, es de un modelo nuevo apenas conocido por los
técnicos. Se dijo en un principio que era alemán. Lo cierto es que resultó ser
ruso. En este trimotor venían dos hombres de aspecto graves y reconcentrados y encerrados
en un mutismo que dio por sospechar. El uno era joven de cara afeitada y de
ojos muy negros. Su barba y su bigote empezaban a tener algunas canas y su
mirada tenía una expresión de recelo sospechosas.
Estos hombres
instalaron en Tánger hasta hace tres
días; nadie, ni aun la misma policía, podía decir, de un modo concreto que los
hubiese seguido, habría ver que lo que celebraban eran continuas entrevistas
con distintas personalidades tangerinas.
En este mismo
café del zoco chico solían venir casi a diario. Pero rara vez hablaban con la
gente, si bien podría apreciarse que cambiaban miradas con varios individuos
que aquí están considerado como espías muy peligroso. Uno de ellos, español por
cierto, es el único que alguna vez, al paso y sin detenerse, cambiaba algunas
palabras con el hombre de más edad. Este era ruso, que pronto la Policía pudo
comprobar averiguar aproximadamente su filación, era gran evidente que al venir
a Tánger traía una importante misión de su país. Pero por estos días, nada más
pudo averiguarse hasta que un día fondean en la bahía de Tánger dos buques de
guerra que ondeaban el pabellón español.
El hecho nada tenía
de importancia. Y se cumplieron todo requisitos del protocolo internacional.
Desembarcó la marinería, que recorrió los "cabarest" alegremente.
Solo en este café, donde recala siempre gentes de condición intelectual
superior, que saben leer en el fondo de aquellas cosas, que el vulgo suelen
parecer más tribales, despertó un profundo recelo la conversación sostenida en
un rincón por dos contramaestres españoles con estos misteriosos personajes.
Muy pocos días
después, la sublevación militar se producía en España. La Armada española
secuestrada a sus oficiales y de convertía en "barcos piratas" que
campaban a su antojo, bloqueando el Estrecho a las tropas sublevadas y se mantenían
fieles al Gobierno de Madrid.
Mientras en Tánger
se producen hechos, cuyos misterios por su importancia se debería aclarar.
Puesto que mis confidentes sus concretan sus opiniones y dicen que estos dos
misteriosos personajes eran dos delegados rusos que traían a Tánger una misión
importantísima del Gobierno de su país. Pronto pudo advertirse que el más viejo
de ellos, celebraba entrevista reservadas, un poco raros y escondidos del
barrio judío.
Esto sirvió para
orientarse un poco a esta mujer desconcertante que me confía en estos momentos
sus impresiones. Y me dicen:
--- El comisario de Policía era francés; el personaje
misterioso del trimotor era ruso. No dejaban los barcos de la Armada española
frecuentar esta bahía, y yo, que me había propuesto espiar todos los
movimientos de este singular sujeto, pude ver que en distinto puntos de la
ciudad se entrevista con moros notables que parecían venir de muy diferente
cabilas y regiones de Marruecos.
Me extrañó un hecho;
que muchos tiempo ellos hablaban francés correctamente, y que más de uno se
entrevistaba también y no sin adoptar algunas precauciones, con el comisario
francés de Policía. Y entonces esto hay algo grave.
Fueron
transcurriendo los días y los hechos en España iban cambiando de cariz. En
Tánger, los consejeros de la Comisión de Control empezaban a preocuparse de la
situación y celebraban frecuenten entrevistas, ya con el comisario de Policía,
ya con distintas personalidades del comercio y las finanzas de esta plaza, ya
con representantes de las regiones marroquíes.
Se produjo por
entonces la reclamación del general Franco, de la Comandancia Militar de Ceuta, y la de Gobierno de Burgo
contra la libertad ilimitada de que venían disfrutando los barcos españoles en
Tánger. En estas reclamaciones hubieron de intervenir oficiosamente los
representante de las Potencias, especialmente de las interesadas en la Junta
Internacional. Y la cuestión tomaba perfiles un poco peligrosos cuando se
produjo la nota francesa sobre "no intervención" en los
acontecimientos de España.
Se reúne en Tánger
la Comisión Internacional de Control, por los motivos de estos hechos se venían
produciendo y fue necesario dar estado oficial a la cuestión. En efecto, se
convocó la Junta de Control. Concretamente no se pude decir en qué forma se
desarrolló la discusión en el seno del organismo. Pero no sería aventurado
decir que algunos de los representantes que de ella forman parte hubieron de
hacer confidencias especiales y hasta de denuncias tal vez de índole muy grave.
Digo esto, porque
nosotros, sin tener en nuestras manos los resortes eficaces de que el Cuerpo
Diplomático y la Policía disponen, estábamos al tanto del fondo del asunto, y
sabíamos el por qué de la presencia de estos misteriosos individuos en Tánger
hubo y hasta casi paso a paso las gestiones que venían realizando, a
regañadientes, por razones que no ocultarían al lector, el Comité de Control de
Tánger hubo de tomar en cuenta la petición del general Franco y declarar la
neutralidad de Tánger y al reconocimiento implícito de la legítima
representación que el general ostentaba.
Y esto, no se pudo
hacer indudablemente, si no después de una lucha de resistencias
internacionales que debieron de obrar poderosamente sobre los representantes de
las naciones en el Comité. No obstante que triunfe el criterio o la imposición
italiana frente a la presión formidable que los representantes franceses venían
ejerciendo.
A partir de este
momento, la política francesa empezó a rodar en un plano inclinado y otras
fuerzas secretas actuaron hasta que los hechos se producían, y por una feliz
causalidad se llegó a conocer el fondo tenebroso de la conspiración que se
tramaba.
Llegando a Tánger
dos comunistas españoles portadores de una ofrecida suma de dinero, destinada a
fomentar una rebelión en Marruecos. Mientras días después hace que otro avión
ruso, salido de Marsella aterrizaba en esta ciudad dos españoles, de militancia
comunista. Estos individuos se entrevistaron inmediatamente con el Comité de la
Unión Comunista de Tánger.
No pudiendo darlo
con certeza, pero sí, es casi seguro que estos españoles eran portadores de una
suma de cerca de cinco millones de francos, posiblemente reunidos con
aportaciones de origen ruso, francés y español, y que a juzgar por las
maniobras que luego llevaron a cabo, se destinaba a provocar y fomentar en
Marruecos una rebelión fulminante de las tribus indígenas de la Zona Española.
La finalidad estaba clara, esta rebelión no podía dejar libre en manos del
Ejército para operar en España, toda vez que quedaba con esto imposibilitado la
imposibilidad de abandonar las posiciones de África.
Se producen unas
horas de mortal ansiedad de una activa intervención internacional. Porque las
representaciones diplomáticas, seguramente, sabían ya cuanto necesitaban acerca
del particular. Dentro de éstas, había intereses contrapuestos y actividades
que se excluían.
Francia e Italia no
podían, como es natural, sino sostener puntos de vista opuestos. En la cuestión
había un dogma y una conveniencia que defender. ¿ Quien vencería a quién?.
El dilema estaba
planteado y no tenía ni aun hoy tiene
solución visible. En diplomacia, una es la expresión y otro muy diferente el sentido,
puesto que Francia tenía circuladas órdenes precisas para esta rebelión fuese
apoyada a todo trance, mientras los representantes italianos tenían la consigna
rigurosa de evitarla a todo trance, también. No trascendía esta lucha intensa,
pero pronto se produjo un hecho elocuente.
La prensa francesa
publicó la noticia de la sustitución del comisario de policía del puerto
internacional de Tánger de origen francés, para sustituirles por el cargo de un
inspector italiano. Como si este incidente no tuviese interés.
Pero el hecho
tenía para España una profunda significación. La rebelión de las tribus de
Marruecos ya no se produciría. Las tropas de Marruecos tendrías libres las
manos, en lo sucesivo, para venir a España, y en el puerto de Tánger, no
encontrarían refugio en adelante los llamados
barcos piratas españoles.
La avenida de España.
Queda un hecho
para concretar. En cuanto a los rusos, desaparecieron en su trimotor tan
misteriosamente como había venido. Pero de los españoles aun se ignoran si
todavía se encuentran en la zona internacional.
También queda por
aclarar un punto interesante. ¿Qué se hizo con los cuatros millones ochocientos mil francos de que eran
portadores los comunistas españoles salidos de Marsella?
Otro día, la
persona que manda esta documentación, tendré tiempo suficiente para
complementarlo hasta el fondo de esta maquinación tenebrosa, que se ofrece en
este documento en grandes rasgos.
Juan de Albacete, redactor
del diario Odiel.
Pero no sabemos nada sobre esta aprendiz de
espías, y de la influencia de esta carta sobre la situación bélica que atravesaba
aquellos días la Nación Española; puesto que día antes de mandar la carta ya en
Tánger se ha había conseguido al fin una actitud neutral, y que ya no permitían
en aquel puerto la entrada de buques
republicanos. Lo que quedaban han salido a toda marcha, antes algunas
advertencias de buques ingleses y italianos. Y sobre todo el buque planeador
Tofiño, buque nodriza y de complemento de las cincos incidencias producidas por
los submarinos republicanos en las costas de Huelva.
Que desde ayer día 13 de agosto, ya Cordero
Bel, el ex alcalde, con Tirado y quince fugitivos de Huelva ya fueron
encontrados en agua de Casablanca y se encuentran detenidos. Junto con el navío
remolcador Vázquez López. Para terminar con llegada de 32 comunistas de Huelva y de Ayamonte
temiendo la situación de Portugal por parte del presidente Salazar, donde detenían
a los izquierdista y lo devolvían a España de nuevo.
El mismo día 14 de Agosto de carta de la
espía; ya sabía que la mayor parte de Europa reaccionaban a favor de Gobierno
de Burgos, y en donde el prestigioso caid marroquí Abd-el-Kader le ha ofrecido
al ejercito salvador de Franco 20.000 combatiente moros perfectamente
instruidos, armados y equipados.
Que el lunes día 17
en La Provincia. Desde Tánger el barco de pesca "Vasconia" que salió
de este puerto con 400 voluntarios para en frente de Malaga y después de cinco
días aparecen solo 300.
El día 18 del mismo
mes ( cuatro día después) llegó a Tánger un contratorpedero pirata, llevando a
remolque al navío al "Alsedo" con las máquinas averiadas y la
tripulación amotinadas sin disciplinas.
El 28 de agosto donde las quejas sobre la prensa van dirigida
en aquellos días van contra el Tribunal Internacional de Tánger procediera con
justicias, puesto que en esta plaza no se permiten la entrada de los periódicos
de Sevilla y Huelva y se la Prensa de Madrid.
Que aquellos día, ya
se había denunciado por parte de las charlas de Queipo de Llanos, que la Zona Zoco Chico frecuentada por las gentes
de izquierdas: queda el café "Fuentes" los
marxistas reclutan hebreos, limpiabotas y malos españoles, para enviarlos a
Malaga a cambios de 10 pesetas diarias conocido pago con el nombre de "La
mona".
Y como nombra a única
chica llamada Dolores Llorca, como la segunda Pasionaria y la aspirante de espía de segunda mano.
De como con el dinero
de la masonería se destina en la segunda planta del Hotel Fuentes citado anteriormente, para intentar
vanamente el levantamientos de las cabilas cercanas.
En fin un entramado digno de una película de espías.
José García Díaz.