“Hay vida en el río Tinto”. Fue el
título de la conferencia que el catedrático Ricardo Amils ofreció sobre este río, en la Sede
Iberoamericana de la Universidad de la Rábida.
El día 4 de
Junio de 1996.
El rector de la Universidad de Huelva, don
Francisco Ruiz Barraquero, fue el encargado de presentar al conferenciante.
También intervino el presidente de la fundación, José Rodríguez de la Borbolla,
quien se refirió a las actividades turísticas que se desarrollan en la zona,
así como el proyecto “de ampliación de la línea férrea hasta Niebla.
El director de la Fundación Rio Tinto, José María Mantecón, sirvió como
anfitrión, un prestigioso equipo de diversas universidades españolas y extranjeras
ha visitado la Cuenca Minera, invitados por esta institución y convocados por
la sociedad Española de Microbiología (SEN), las universidades de Huelva,
Autónoma de Madrid e Internacional de Andalucía, así como la Fundación
Ríotinto, el grupo de Taxonomía biodiversidad y filogenia ( uno de los muchos
con los que cuenta la SEN, se reunieron durante tres días en la sede de la
Rábida para intercambiar impresiones sobre el complicado mundo de la
microbiología.
Ricardo Amils es el responsable de estar
llevando a cabo unos de los estudios más interesantes de los últimos años sobre
la biodiversidad microbiana del río Tinto, un curioso caso de “contaminación
natural”, posiblemente único en el mundo. Ya que el problema de la Microbiología
es el tamaño de los organismo que se estudian” y recuerda que esta ciencia se
encuentra en mantillas realizando principalmente una labor de “entender lo que
tenemos”
Sobre la aplicación práctica de esta ciencia, opina el microbiólogo de la
Universidad Complutense de Madrid reflexiona en voz alta:” Si no sabemos la
diversidad que hay en el río Tinto nunca sabremos las posibilidades de los
microorganismos que allí se encuentra”.
Estos
microorganismos tienen un sinfín de aplicaciones que van de la medicina a la
producción industrial. Hoy en día, en países como chile, el 50 por ciento del
cobre se extrae por bíominería realizada por estos organismos diminutos. Otra aplicación importantísima es
la utilización de las bacterias como las seudomonas para la descontaminación de
las aguas. Plásticos biodegradables o fibras sintéticas son otros campos donde los microorganismos están
presentes con gran éxito.
Tanto Ricardo Amils como otros microbiólogos españoles se lamentan que la
industria nacional no aproveche las investigaciones hechas por los
microbiólogos.
Otro destacado científico que participo en
estas conferencias, tenemos al catedrático
de Microbiología de la Universidad de Barcelona, que pertenece a un
grupo de investigación diferente al que se reunió en esta ocasión en la Rábida.
Ricardo Guerrero, puso de manifiesto la importancia de la SEN, unas de las
asociaciones científicas más importantes de Europa, contando con más de 2.000
investigadores en toda España.
La reunión de La Rábida tuvo como ponentes a
autoridades mundiales en el campo de la Microbiología, como es el caso del
profesor H. Trüper, de la Universidad de Bonn, o Estackebrandt, de la Deutsché
Semmlung von Mikroorganismen und Zellkulturen, que disertó sobre la importancia
de la biodiversidad en la biotecnología o del profesor A. Lazcano, de la
Universidad Autónoma de México que pronunció la conferencia final de las
jornadas.
Tras una amplia sesión de conferencias y
charlas científicas, dedicaron un día de visita al zona minera de Ríotinto,
donde los microbiólogos pudieron observar las viejas instalaciones mineras
inglesas.
El día siguiente se aprovecho parte de
jornada a una reunión organizativa del grupo de Taxonomía, Biodiversidad y
Filogenia de la SEN, en el que el presidente de dicha Sociedad dio lectura del
acta de la sesión anterior así como la nueva dirección del grupo, adaptación de
los estatutos y renovación del cargo.
(Del Huelva
Información; 2-5-1996. Autor: Fernando Quiroga,)
Domingo 19 de septiembre de 1999. Del
mismo periódico por el profesional Rafael Moreno.
Un proyecto que ronda los despachos del
Ministerio de Medio Ambiente, La Junta de Andalucía y la Confederación
Hidrográfica del Guadiana pretende compatibilizar el uso hídrico de la cuenca
del río Tinto con la investigación internacional. Para ello se estudia una
modificación de su cauce original que salvaguarde la parte contaminada de forma
natural, con intención de unos 25 kilómetros de la reconversión hidrológica de
la cuenca.
El equipo de científicos que dirige el
catedrático de Microbiología de la Universidad
Autónoma de Madrid, Ricardo Amils, solicitó hace años y medio a la
organización de Naciones Unidas para la Ciencia la Educación y la Cultura
(Unesco) que declare el río Tinto como Patrimonio de la Humanidad. La
institución aún no ha respondido a esta petición que de momento no ha contado
con el respaldo unánime de los partidos políticos y organizaciones sociales.
Sin embargo, según ha desvelado el profesor
Domingo Carvajal Gómez, adscrito al área de Ingeniería cartográfica, geodésica
y Fotogrametría de la universidad de Huelva, que existe una negociación entre
la Junta de Andalucía, el Ministerio de Medio Ambiente y la confederación
Hidrográfica del Guadiana que busca una alternativa viable a la conservación de
las aguas del Tinto tal y como nacen. Es decir que mantenga las características
de sus entrañas.
El río Tinto guarda un misterio sin
desvelar pues posee un sistema autoorganizado de vida fuera del equilibrio
lógico. Una población de bacterias que logra subsistir en un ambiente tan
hostil como supone un 2,2 de Ph y altísimas concentraciones de hierro. Esto
unido a la presencia de la luz del sol le convierte en un sistema similar al
del planeta Marte. Si hubo vida en Martes, ésta pudo desarrollarse de la misma
forma que lo hace hoy en el Tinto.
En un principio el proyecto de investigación
del microbiólogo Ricardo Amils y el interés de la Agencia Espacial
Norteamericana por las condiciones de la vida en el río estaba amenazado por la
limpieza de la Cuenca del Tinto, un proyecto que la junta de Andalucía tiene en
cartera desde hace años y que incluso ha sido llevado al Senado en varias
ocasiones y otras tantas ante el anterior Ministerio de Obras Públicas.
A
raíz del trabajo de investigación de Amils, de la visita pasada primavera a la
zona del máximo responsable de la Nasa, Daniel Goldin, y del científico
onubense y astrobiólogo Juan Pérez Mercader, el proyecto de limpieza de la
Cuenca del Tinto se quedo paralizado enseguida, en todas las administraciones.
Teniendo proyectado de complemento una presa
para el abastecimiento de los pueblos, como la de zona de regadío.
Puesto que una vez separado el río original
de la cuenca matriz, los afluentes de agua de lluvias procederían a la limpieza
natural, según apuntó el profesor Carvajal tras participar en el congreso que
la Asociación Internacional del Agua en
la Minería celebró la última semana en Sevilla.
El profesor Carvajal expuso antes
expertos de cuarenta países la importancia para la investigación del río Tinto.
Diciendo que “si este río estuviera en los Estados Unidos sería a buen seguro
un polo de atracción como loes hoy el parque de Yellowstone o el Gran Cañón del
Colorado”.
En su ponencia, Carvajal Gómez apuntó que
en vista de lo resultado de la analítica obtenida, el descenso de los niveles
de concentración de metales pesados en
las aguas del río se hace cada vez más acusado tanto se avanza desde su
nacimiento hasta la desembocadura. Esta peculiaridad propiciaría su limpieza
aguas debajo de la cabecera.
La ponencia de Carvajal hace referencia a
que la parte superior de río Tinto constituye la mayor concentración de
mineralización de sulfuro del Mundo.
Tuvimos que esperar con inquietud esta
grandiosa noticia que ocurrió el martes día 14 de Diciembre del 2004.
“Se
declaran Paisaje Protegido los tramos altos y medio del Rio Tinto.”
Este espacio natural ocupa una franja de 57
kilómetro a lo largo de diez municipio de Huelva y uno de Sevilla que suman
16.956,79 hectárea.
Además de salvaguardar los valores paisajísticos de este curso fluvial,
ligados durante siglos a la actividad minera, la decisión adoptada supone
también otorgar una protección específica a las 12.636 hectáreas del término
municipal del Berrocal que resultaron afectada por el incendio del pasado mes
de Julio.
Este
es el segundo que se declara como Paisaje Protegido en toda Andalucía, previsto
por la legislación estatal para recuperar los valores ecológicos y culturales
de zonas con fuerte intervención humana, después del Corredor Verde del Guadiamar, hasta ahora el
único territorio con este régimen de protección en Andalucía.
El río Tinto, en cuya cuenca alta se sitúa
el mayor yacimiento minero a cielo
abierto de Europa, conforma un enclave único en el mundo, tanto como por sus
belleza natural como por sus extraordinaria condiciones ambientales, según destacó
el portavoz del Gobierno, Enrique Cervera, en la conferencia de prensa
posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.
El mismo Cervera recordó que este lugar
fue elegido por la agencia espacial norteamericana NASA para estudiar sus
formas de vida, debido a la probable parecida entre sus condiciones ambientales
y las que podrían darse en el planeta Marte.
Otros objetivos de la declaración del Río
Tinto como Paisaje Protegido se dirigen a conservar las riqueza geomorfológica
originada por la actividad minera; regenerar los espacios más degradados sin
alterar la singularidades del curso fluvial y su entorno; ampliar la dotación de instalaciones de uso
público, y fomentar el desarrollo de programas de investigación y educación
ambiental.
En cuanto a la fauna y flora, la gestión del
nuevo espacio protegido prestará especial atención a especie amenazadas como el
llamado brezo de las minas, planta endémica de Huelva en peligro de extinción,
y distintas variedades de murciélagos que anidan en las cavidades y canales de
los enclaves mineros.
Además de la declaración de Paisaje Protegido
acordada hoy, La Junta de Andalucía tiene previsto completar la protección de
los valores históricos y culturales de la Zona Minera de Ríotinto y Nerva con
su reconocimiento como Sitio Histórico, una figura con la que la Consejería de
Cultura garantizará la salvaguarda de los distintos bienes arqueológicos,
etnográficos, industriales y arquitectónico que componen el patrimonio de la
comarca minera.
Con la declaración del Paisaje Protegido del
Río Tinto, son ya 146 los territorios y enclaves incluidos en la Red de
Espacios Naturales Protegidos de Andalucía, que con sus 1´70 millones de hectáreas son los más extensos de Europa.
José García
Díaz.