El
Domingo 16 de Noviembre de 1908. Tuvo el pueblo de Bonares que ser testigo de
un desagradable hecho ocurrido a una vecina de este pueblo llamada Dolores Domínguez,
acompañadas de dos niñas de pequeña de muy corta edad.
Que, habiendo
salido de Huelva para llegar a la estación de Niebla, se vio sorprendida por
dos agentes del municipio de Bonares, que tomando una actitud forzosa le
recomendó terminantemente le prohibieron, en nombre del alcalde, se
dirigiera a dicho pueblo donde tenía propósito de marchar por tener allí su
residencia.
En vano, la
infeliz mujer rogó a los agentes les dejaran marchar para su pueblo de Bonares,
donde asuntos de gran interés reclamaban su presencia, haciéndole notar los
perjuicios que se le venían encimas.
Los agentes sin
darle explicaciones y haciéndose los sordos a tanta súplica, se opusieron a los
deseos de la referida mujer, la cual se encontró obligada a regresar de nueva
para Huelva en unión de sus hijas.
Tan pronto como
llegó la Dolores Domínguez, lo primero que hiso es poner el hecho en
conocimiento del señor Gobernador don José María Maestre (el cual solo llevaba
un mes en su cargo), quien ordenó a la guardia civil del puesto de Bonares que
se personara al día siguiente en la estación de Niebla para acompañar a Dolores
Domínguez hasta su pueblo, al mismo tiempo que se haga las necesarias
indagaciones que motivaron la resolución por parte del alcalde don Mariano
Suarez Coronel.
La mujer
llegó a entrar en su pueblo de Bonares custodiado por la pareja de la guardia
civil, sin que nadie se opusiera a su entrada en el pueblo.
Según
se desprende de las investigaciones de la benemérita, el alcalde se fundó para
la citada resolución en un exceso de celos, puesto que una hija de Dolores,de solo cuatro
años de edad, estuvo enferma con sarampión hace algún tiempo.
,
En aquel vecindario
bonariego está muy comentado tan rigurosa medida tomada por el alcalde, en
tanto en que tiene en el mayor abandono la higiene del pueblo.
El citado alcalde
don Mariano Suarez Coronel, de la familia de los caciques alcaldables locales,
ya que eran todos descendiente del señor de Bonares, don José María Carrasco
Vega “El Patuo”, donde se repartían la Alcaldía a conveniencia por tiempo a sus
necesidades, un mes, dos, etc…
Hacían poco
tiempo que tuvieron un ajuste de cuenta con un Alcalde anterior llamado Teófilo
Carrasco Domínguez, del cual solo estuvo un solo mes de Alcalde y encima pasó
un gran disgusto ya que fue denunciado en el Juzgado de Moguer por la conocida
familia, este mismo año, por una causa de prolongación de sus
funciones como Alcalde y de sus concejales. Del diario “La Provincia” del 24 de Agosto.
La acusación
pública y privada, representada por el señor Cos---Gayón y el letrado señor Gómez,
pidieron que se imputara a los procesados, la pena de 6 años de inhabilitación
especial temporal, para el ejercicio de los de Alcalde y concejales del
Ayuntamiento de Bonares.
Los defensores
señores Mora Romero y Marchena, solicitaron la absolución de sus defendidos,
entendiendo que no constituía delito los hechos.
José García Díaz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario