Todo el movimiento
liberal y demócrata que mantuvo este pueblo cuando la Primera República, donde
fue de los pocos y único en la Comarca con la Alcaldía controlada por los
masones, que fueron de los punteros en la Provincia en querer implantar la
Reforma Agraria. Que cuando en España, empieza la era Cantonal, por donde dar
comienzo de nuevo a proclamarse los nuevos Reinos de Taifas; donde Provincias
Andaluzas les declara la guerra una a la otra como la de Granada a Jaén,
pueblos a bastonazos limpios con el del vecino. La orgullosa Sevilla ahora
declarada Cantonal en disputa con amenazas con Huelva, pidiendo de nuevo que la
aldea del Rocío y el Coto de Doñana para formar parte de su Provincia.
Si Huelva fue desde
el primer momento fiel al Gobierno Central, más aún fue Bonares, que con
acuerdo por mayoría de toda la Corporación celebrada el día de 1873 mandó al
Teniente Alcalde don Daniel Carrasco a presentarse en Madrid y en nombre de
este pueblo ofrecerle su mayor respeto de fidelidad al Gobierno de la Nación,
al mismo tiempo preguntar por el expediente remitido anteriormente sobre el
repartimiento de terreno para los vecinos.
Del diario La
Discusión de día 1 de abril de 1873.
Los Masones de este
pueblo adaptaron la "Casa de la Villa" o Casa del Pueblo, situada en
la Plaza de la Iglesia (lo que fue en tiempo la esquina de la puerta de la
Parroquia del Rocío utilizada después como escuela, para terminar sus días en
un almacén de frutas). Pero la primera referencia de esta casa la encontramos
en el apartado de la "Ventas de Bienes Eclesiásticos del Clero
Secular".
Boletín nº 1335 del
17 de diciembre de 1842.
" Una casa que fue granero frente a la Iglesia en
Bonares, y fue de su fábrica parroquial, que tiene 96 varas cuadras divididas
en varias piezas. Linda por la
izquierda, con el almacén de dicho templo, y por la derecha con casas de de
Manuel Santos y Alonso Velo; no aparece que tenga carga o gravamen alguno. Está
señalada en el registro con el nº. 92, arrendada por la Tácita en 475 rs.
anuales, es apreciada con un valor de 4.200 reales y capitalizada, en 10.687
rs. y 17 maravedíes donde sale a subasta por ellos".
Pero la entrada de
las libertades en esta villa sometida desde siglo al sistema caciquil señorial
desde la Edad Media, se debió en parte a los "Carlistas" o los
llamados "los socialistas de alpargata" de la mano de vecinos con
bastante inquietudes liberales ( ya había cinco vecinos, metido en la fundación
de la Masonería en Huelva en el llamado "Triangulo 56" por ser el
número de hermanos que la formaron). Y como no de nuevo contaron con otro cura
párroco progresista don Juan de Mesa y
Cueto como líder (cura de misa y olla) y a otro sacerdote auxiliar don José
María Delgado y tres sacristanes que marcaron
de nuevo la vida local. (Dentro del apartado Dios. Patria y Rey).Pero en esta
ocasión la noticia se publicó en varios periódicos nacionales. Ya parecía ser
que los bonariegos no tenemos punto medio. En las elecciones Generales del mes de marzo de
1871, un diario madrileño no se podía explicar que un pueblo con 2700 habitantes contando con 800 votantes, los
"Carlistas" sacaran 706 votos mayoría absoluta. ( del libro la
Bandera Carlista, pgn. 623.)
Lo curas Carlitas según la revista "La Flaca".
Tomamos algunas
notas de las Actas Capitulares, sobre la actividad local del 18 de febrero de
1871. En pleno del Ayuntamiento, lamenta
la muerte del hacendado don Mariano Suarez Díaz, que ejercía como Regidor Síndico
suegro de José María Carrasco " El Patuo", que presenta este día su
dimisión como concejal; Su hijo Mariano Suarez Martín propietario y Juez
municipal, todo quedaba el poder local en buena familia. Firmado por el Alcalde
Juan Márquez y por el señor secretario don Juan Antonio de Soto.
Todos estos
miembros de la Corporación, se encontraban sujeto a la ley del 23 de Febrero de
1870, para proceder a los sorteos de los vecinos que debían de formar la
Comisión del Contribuyente, destinado a vigilar y controlar los presupuesto
municipales, quedando de esta manera.
Por parte de los
propietario, 6 individuos; por de los
labradores, 5; por los jornaleros, 5; arrieros, 3; taberneros, 3; y tendero,4;
quedando el Municipio formado por 26 concejales.
Al mes siguiente aparece
en el B.O.P.H. con el nª 27 el señor José Mª carraco Vega "El Patuo"
como el mayor propietario local por el
pago económico contribución de 2.103´50 pesetas.
El José María Carraso,
enemigo a muerte de los curas, se demuestra por tres denuncias en el Juzgado de
Instrucción de Moguer, puesta por el párroco donde ya aparece el nombre del
guarda espalda y fiel vasallo el citado matón
el "Vichi" el de la "Chivata" donde hubo hasta bastonazos.
Unos de los algunos sistemas implantado en este municipio por los Señores locales.
Mientras por parte
del "Patuo" lo denuncia al Presbítero en el Gobierno Civil "Reclamando la conducta de algunos ministros
del altar que convierte el púlpito, en tribuna política pidiendo la sublevación
de los vecinos"
El día 3 de mayo de
1871, de parte de la Administración Económica de esta provincia reclamando a los vecinos
morosos de este pueblo por los gastos de fincas desamortizada: don José Márquez
con 64´50 pesetas; la señora doña María
Antonia Velo por medio de bienes del Clero unas 61´26 pesetas; Sebastián
Carrasco, con 36´50 pesetas; Gaspar Camacho con una deuda de 19´37 pesetas.
Mientras se acuerda dar posesión a doña María Dolores Carrasco, la finca nº
2885 del inventario, sita en la Angorrilla, término de Niebla.
El día 20 del mes
citado, el señor Gobernador Presidente don Eduardo Garrido Estrada que a través
de Secretario don Alfonzo García Glemenín. hace una reclamación al Ayuntamiento
de este pueblo, donde le piden que presenten las cuentas municipales que ya
superan las 14.486´3 pesetas. Las misma que tuvieron que hacerla frente a este
desfalco el Cabildo Carlistas y los de los Masones. Porque antes como ahora,
los ricos son los que menos contribuyen pagar a la Hacienda.
José García Díaz.
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